Como es habitual cada vez que participamos en algún evento de btt, en esta entrada comentamos aquellos aspectos que, bajo nuestro punto de vista, consideramos más destacados (y también los que necesitan mejorar) de la Non-Stop Tracks del Diable.
Por el lado positivo destacaría cuatro elementos: el recorrido, el ambiente, la limitación del número de participantes y una clara vocación por mejorar.
El recorrido
Al menos hasta donde nosotros llegamos (km 109) el paisaje por el que discurre la prueba es muy bonito e interesante. Los tramos de sendas son realmente hermosos. Los tramos más abiertos tampoco tienen desperdicio, así como algunas de las vistas a pesar de que no se alcanzan grandes altitudes. Sin duda, valdría la pena volver simplemente para disfrutar de la ruta en dos o tres etapas.
El ambiente
A diferencia de otras pruebas, aquí el ambiente competitivo no era el imperante. Obviamente están aquellos que salen a disputar la carrera, pero había muchos otros que su objetivo era alcanzar su reto: llegar a la meta. Y eso se nota mientras das pedales con otros participantes.
Número limitado de participantes
Limitar el número de participantes facilita mantener unos determinados estándares de calidad que, en muchas ocasiones, no es posible alcanzar en eventos muy masificados. Aunque vaya en detrimento de la rentabilidad económica, un número limitado de participantes permite que la prueba sea más fluida y esté mejor controlada.
Vocación por mejorar
Puede sorprender este aspecto, pero algo que debería ser normal y lógico, no siempre se da. La organización nos ha tratado con mucha atención antes y después del evento. Siempre se ha mostrado receptivo a nuestras observaciones, peticiones o comentarios con el objetivo de dar un buen servicio y mejorar en futuras ediciones. Solo por ello, uno perdona cualquier error y les desea éxito en el futuro.
Por el lado de las posibles mejoras hay que mencionar: los avituallamientos, la ubicación de los controles de paso y la reunión informativa el día anterior a la prueba.
Los avituallamientos
De esto ya hemos hablado extensamente en una entrada de hace pocos días. Lamentablemente, esta prueba no ha sido una excepción en la calidad. Pero como decía en aquella entrada, no perderé más tiempo hablando de este mal tan extendido.
La ubicación de los controles de paso
Los puntos de control no estaban ubicados exactamente en el kilómetro anunciado. Al menos eso pareció. A la confusión debió contribuir que el kilometraje de la prueba no empieza en la salida, sino una vez se retira el vehículo de la organización en la salida neutralizada. Esto creo que debería corregirse. También en el track. Ello evitaría confusiones. Aquí podéis consultar (en catalán) la opinión de otro participante sobre este aspecto.
La reunión informativa el día previo
Esta reunión presentó tres problemas: el lugar donde se celebró no era el más adecuado pues era tan pequeño que no cabían todos los participantes. Se retrasó demasiado, lo que imposibilitó cenar y acostarse pronto. Algo muy importante ya que al día siguiente la prueba empezaba a las 6.00 horas. El último problema fue que la información que dieron era prácticamente la misma que ya habían distribuido. Sinceramente, la reunión no aportó nada importante. Una sugerencia para el futuro es repartir un folio en el momento de la inscripción con esa información.
Nuestra valoración en conjunto es positiva. Es una prueba modesta pero con encanto. Así que seguramente volveremos (además, como no conseguimos acabar…)
ACTUALIZACIÓN EDICIÓN 2013
Tras participar de nuevo en la edición de 2013, nuestra valoración ha mejorado. Dos de los puntos que recomendábamos mejorar, lo han hecho: sustituir el briefing por una nota informativa los días anteriores (un gran acierto); y sobre todo, los avituallamientos. Estos han estado mejor organizados, con comida suficiente para los que vamos a la cola del peletón y con comida más sustanciosa.
Se nota el interés por mejorar una de las pruebas más duras de la btt en nuestro país.
Un análisis muy interesante, gracias.